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Un poema para Dios en momentos de angustia y tribulación.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Encontré este poema, no tiene nombre de autor, pero quien lo haya escrito tuvo que ser alguien parecido a nosotros que pasaba angustias y tribulaciones; alguien que supo elevar su clamor a Dios, y lo hizo de manera muy especial en forma de poema. Me identifico con este personaje, quizá usted también lo haga. Acá os lo dejo:

Jehová, escucha mi oración,
Y llegue a ti mi clamor.

No escondas de mí tu rostro en el día de mi angustia;
Inclina a mí tu oído;
Apresúrate a responderme el día que te invocare.

Porque mis días se han consumido como humo,
Y mis huesos cual tizón están quemados.

Mi corazón está herido, y seco como la hierba,
Por lo cual me olvido de comer mi pan.

Por la voz de mi gemido
Mis huesos se han pegado a mi carne.

Soy semejante al pelícano del desierto;
Soy como el búho de las soledades;

Velo, y soy
Como el pájaro solitario sobre el tejado.

Cada día me afrentan mis enemigos;
Los que contra mí se enfurecen, se han conjurado contra mí.

Por lo cual yo como ceniza a manera de pan,
Y mi bebida mezclo con lágrimas,

A causa de tu enojo y de tu ira;
Pues me alzaste, y me has arrojado.

Mis días son como sombra que se va,
Y me he secado como la hierba.

Mas tú, Jehová, permanecerás para siempre,
Y tu memoria de generación en generación.

Te levantarás y tendrás misericordia de Sion,
Porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo ha llegado.

Porque tus siervos aman sus piedras,
Y del polvo de ella tienen compasión.

Entonces las naciones temerán el nombre de Jehová,
Y todos los reyes de la tierra tu gloria;

Por cuanto Jehová habrá edificado a Sion,
Y en su gloria será visto;

Habrá considerado la oración de los desvalidos,
Y no habrá desechado el ruego de ellos.

Se escribirá esto para la generación venidera;
Y el pueblo que está por nacer alabará a JAH,

Porque miró desde lo alto de su santuario;
Jehová miró desde los cielos a la tierra,

Para oír el gemido de los presos,
Para soltar a los sentenciados a muerte;

Para que publique en Sion el nombre de Jehová,
Y su alabanza en Jerusalén,

Cuando los pueblos y los reinos se congreguen
En uno para servir a Jehová.

El debilitó mi fuerza en el camino;
Acortó mis días.

Dije: Dios mío, no me cortes en la mitad de mis días;
Por generación de generaciones son tus años.

Desde el principio tú fundaste la tierra,
Y los cielos son obra de tus manos.

Ellos perecerán, mas tú permanecerás;
Y todos ellos como una vestidura se envejecerán;
Como un vestido los mudarás, y serán mudados;

Pero tú eres el mismo,
Y tus años no se acabarán.

Los hijos de tus siervos habitarán seguros,
Y su descendencia será establecida delante de ti.

Fuente: Salmo 102.

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El gran puerto.

miércoles, 27 de julio de 2011

ALABANZAS.

Un hermanito subió a predicar en el transporte colectivo donde acostumbro viajar. En su sencillez, el hermano desordenó un poco el mensaje y se cortó. Pero cantó una alabanza que dejó en mi corazón una reflexión. Traigo al blog la letra por si en algo pudiera serle de provecho a usted también.

Esta es la letra, por supuesto cantada y con música se disfruta mejor, pero ya sólo la letra trae un gran mensaje:

Por la mañana me llamaban mis parientes,
Hermano venga que ha nacido un nuevo ser,
Hermoso niño que ha nacido en la familia,
Con alegría le celebraban sus papás,
Y por la tarde otra familia me llamaba,
Hermano venga porque ha muerto mi papá,
Cómo es posible que se nos haya ido,
Si a medio día regresó de trabajar.

//Y como dijo el poeta,
Este mundo es un gran puerto,
Donde unos barcos llegan, y otros se van//

*** CORO ***

Se muere el pobre,
Se muere el rico,
Se muere el alto,
Y el más bajito,
Se muere el hombre
Y después donde estará/
 //Si caminó con Cristo,
Al paraíso va//

2

Hermano mío no presumas orgulloso,
Alzando el pecho, como nadie al caminar,
Si todavía, no le has dado tu alma a Cristo,
Con grande pérdida, tendrás que lamentar,

Pues como dice La Biblia:
Aunque ganes todo el mundo,
Pero si pierdes tu alma,
¡Qué falsedad!

Un saludo.

http://stanleygomez.blogspot.com

Dios ministra en la alabanza, vea por qué.

sábado, 4 de septiembre de 2010

Cierto día un predicador amonestó a los organizadores de un evento evangelístico porque demasiado tiempo se tomaron los grupos de alabanza y redujeron el tiempo para la predicación, al final se convirtieron a Cristo alrededor de unas 10 personas, ¡gloria a Dios!

En otra ocasión me invitación a un concierto de alabanza, pero esta vez no hubo espacio para un predicador, al final del evento 92 personas vinieron a Cristo como resultado de ser ministradas por El Señor, ¡exaltado sea!

En las iglesias, muchas personas durante el servicio de cantos y adoración, se dedican a compartir con algún hermano o amigo alguna bebida y comer algo en el cafetín, mientras el pueblo de Dios alaba y adora; otros simplemente como el caso de muchos servidores se nos va el tiempo recopilando datos y llenando informes, o simplemente conversando con algún otro hermano, y esperamos hasta que el predicador sube al púlpito para ingresar a escuchar La Palabra. Esto no debe ser así.

A mi juicio personal, los cantos y la adoración es lo que nosotros damos al Señor; la predicación, es el consejo que El Señor nos da a nosotros, y debemos atesorarlo para ponerlo en práctica.

Durante este espacio podemos adorar, llorar y echar todas nuestras dolencias delante la presencia del Señor, y pedir fortaleza y protección por algo que nos aflige y preocupa. Por esta razón, no comparto la frase de los que dirigen la alabanza en el púlpito cuando al finalizar su tiempo dicen: "Ahora viene lo mejor, La Palabra de Dios"; y ciertamente nada se compara a ella, pero también debemos recordar que todo tiene su tiempo, y su razón de ser, y lo que acabamos de dar a Dios no es ni más ni menos que adoración, por tanto no es menos importante. Sin embargo, todo es necesario.

Fuí sanado de una enfermedad que padecí por más de 30 años mientras adoraba. Durante el espacio de adoración recibimos fortaleza y Dios muchas veces me ha quitado mis temores cuando algo me afligía y preocupaba e invoqué su ayuda y protección. Por eso es importante no distraernos y mantener los ojos cerrados durante el servicio. Gracias a Dios por los servidores que siempre están atentos a que podamos gozarnos mientras cerramos nuestros ojitos.

Conclusión, no precisamente sólo porque haya un predicador Dios salvará a las personas, aunque siempre lo hace y gracias a Dios por ellos. Pero es necesario inculcar en nuestros hijos y jóvenes el valor de alabar y adorar a Dios en los servicios. Pueden cantar canciones cristianas, y pienso que todos podemos hacerlo, pero sin descuidar la alabanza y adoración a Dios, que es algo mucho más especial al momento de estar en un servicio.

En la Biblia encontramos:

"Pero tú eres santo,
Tú que habitas entre las alabanzas de Israel." Salmo 22:3

"Cantad a él, cantadle salmos;
Hablad de todas sus maravillas." 1 Crónicas 16:9

"Cantad a Jehová toda la tierra,
Proclamad de día en día su salvación." 1 Crónicas 16:23

Si desea conocer en qué partes de La Biblia se habla de por qué debemos cantar y alabar a Dios, click quí.

En el siguiente post, hablaré sobre algo parecido.
¡Que Dios les bendiga!
http://stanleygomez.blogspot.com

El poder que tiene un canto cuando alaba Al Señor

martes, 1 de septiembre de 2009

Hoy quiero compartir una experiencia de mi vida personal, que igual a las anteriores, ésta también marcó mi vida para siempre; y no sólo la mía, sino la de mi esposa también. Esta historia está relacionada con la chispa que encendió la mecha y nos impulsó para que propusiéramos en nuestro corazón buscar una iglesia donde congregarnos.

Era un sábado, me preparaba para ir a la oficina. Al acercarme a la puerta, nuestra vecina de al lado que era cristiana, estaba escuchando en su grabadora una alabanza de los hermanos Chacón, la alabanza que escuchaba era "YO TENGO UN SALVADOR".


Click en Play para escuchar.

Normalmente hubiera salido como de costumbre, pero esta vez algo llamó mi atención: ¡Mi esposa la estaba cantando!, lo cual me dejó sorprendido sobremanera. No pude evitar irme a trabajar sin hacerle la pregunta: ¿Conoce usted esos cantos?, a lo cual me contestó: Si claro, cuando eramos niñas mi hermana y yo ibamos todos los días a la iglesia de nuestro vecindario; ¿¡en serio!? -le contesté con cara de asombro, es que yo también asistí a una iglesia cristiana cuando era niño, también conozco esos cantos -proseguí. No sabía que usted conocía esas alabanzas. Claro, nunca habíamos abordado ese tema desde que nos casamos, era la primera vez, fue toda una bomba para mí.

Hice una pausa y le pregunté mirándola a los ojos: ¿Y por qué no me lo había dicho antes? ¿Por qué no me había dicho que había sido cristiana?, de haberlo sabido desde antes hubiéramos ido a una iglesia, a lo que me interrumpió: Porque estaba esperando que de usted saliera la iniciativa -exclamó.

¡Guao! dije en mi corazón, hacía aproximadamente un mes atrás yo había estado experimentado el trato de Dios conmigo en lo más profundo de mi ser. Por lo que se había despertado en mi, una sed de Palabra de Dios, y había estado orando pidiéndole a Dios que me concediera encontrar un lugar donde congregarme. Pero esa etapa la narraré en otro capítulo.

Esas palabras de mi esposa fueron la mecha que encendió mi determinación por planear en serio y en familia buscar una iglesia donde congregarnos. -Así que le dije: ¿Qué le parece si a partir del 1 de enero del próximo año nos tomamos como primer punto de agenda la salvación de nuestra alma, y buscamos una iglesia donde congregamos?, a lo cual ella afirmó con alegría: Está bien!; entonces le dije: Prioridad para el próximo año "La salvación de nuestras almas". Esa conversación ocurría un 26 de diciembre.

A todo esto mi vecina no se daba cuenta lo que estaba ocurriendo en nosotros; estoy perfectamente convencido que no fue la vecina, sino Dios en su llamamiento usó ese canto para llamarnos. La letra de ese canto es una confesión de fe que influyó en nosotros para tomar en serio que teníamos que volvernos a Dios.

La mayoría de veces no logramos medir los efectos que tienen nuestros actos en las demás personas; de ahí que bien podemos ser de bendición o maldición para ellas. Para el caso, estoy seguro que mi vecina ni cuenta se dio, que ese canto fue para nosotros la bendición que hizo despertar nuestra conciencia, y fue la mecha que encendiera el fuego de Dios en nuestras vidas.

Estoy convencido que Dios tiene un trato especial con cada uno de nosotros, un día y una hora señalados para su llamamiento; por eso querido amigo y amiga, cuando Dios le motive a buscarle, no dude en venir a Él, porque en su palabra está escrito:

"Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera." Juan 6:37; y también dice: "Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano." Isaías 55:6.

Probablemente usted es un hijo o hija de Dios, y procura servirle a Él evangelizando a las personas que no conocen a Jesús como lo manda su Palabra; pero no olvide que a veces, una alabanza, una frase, quizá una notita, o hasta un folleto por pequeño que sea, puede ser el fósforo que Dios está esperando que usted encienda para llegar al corazón de las personas.

El pastor Mario Vega cuenta en su testimonio, que fue un pequeño folleto sobre una mesa, lo que despertó en Él curiosidad por escudriñar en la Biblia sobre los mandamientos del Señor, sin ser él un verdadero cristiano; ahora es uno de los predicadores que Dios ha usado para testimonio a muchas naciones.

"Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié." Isaías 55:10-11 (RV1960)

¡Sigamos adelante proclamando las buenas de salvación, nunca sabremos hasta dónde Dios llegará al corazón de las personas por el esfuerzo que usted hace.

Espero que este relato haya sido de bendición para su vida.

¡Que nuestro Señor Jesucristo le guíe y bendiga!

http://stanleygomez.blogspot.com