Un diálogo que te edificará.

sábado, 20 de junio de 2015

—¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí! —gritó el ciego.
—¿Qué quieres que haga por ti?
—Señor, quiero ver.
—¡Recibe la vista! —le dijo Jesús—. Tu fe te ha sanado.

(Lucas 18:35-43).
De este diálogo seguro podemos aprender muchas cosas:

1 Debemos saber a quién pedir;
2 Hay que dejar atrás la capa vieja: el orgullo;
3 Pedir con fe;
3 Insistir, aunque otros traten de bloquearte;
4 Pedir con humildad, con reverencia;
5 Hay que ser específicos en lo que se pide;
6 Debemos ser agradecidos;
7 Debemos alabar y seguir al Rey.

Muchos, lamentablemente, luego de recibir el milagro no damos ni las gracias, ya no se diga servirle.

"Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que llama, se le abre." —Cristo. ( Mateo 7:8).