Mostrando entradas con la etiqueta Iglesia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Iglesia. Mostrar todas las entradas

Unas palabras a la fidelidad

viernes, 11 de noviembre de 2011

Querido(a)s amigo(a)s y hermano(a)s en Cristo Jesús:

Los tiempos son finales y Satanás y su ejército de demonios andan sueltos buscando a quien devorar, y por ser espíritus, sus ataques son invisibles, sutiles, estratégicos y persistentes; también llevan poder para derribarnos si no estamos bien parados en La Roca Firme que es Cristo.

Los creyentes como Pueblo de Dios, como Novia de Cristo, como Prometida del Cordero que somos, debemos mantener nuestras vestiduras blancas; es decir, sin pecar y aguardando la promesa de Su venida. Satanás lo sabe, y por eso no descansa día y noche buscando derribarnos, atacándonos con sutilezas, que son las que más daño nos causan.

No hemos sido glorificados aún, por tanto, seguimos en este cuerpo corruptible y en un mundo lleno de maldad, el cual influye en nuestras vidas si no andamos listos.

Pero, para poder mantenernos firmes y fieles al Señor, Él dejó la fórmula eficaz para poder resistir al diablo:
  1. Fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza (Ef. 6:10),
  2. Vestirnos con la armadura de Dios (Ef. 6:11),
  3. Nuestro enemigo está identificado: El diablo y sus demonios (Ef. 6:12),
  4. Tomad la armadura de Dios así venceremos, luego seguid firmes (Ef. 6:13),
  5. Amarrarnos la cintura con la verdad. (Ef. 6:14), y haciendo justicia lo cual es una coraza (Ef. 6:14),
  6. Como buen calzado que resiste los caminos ásperos, listos a predicar el evangelio de paz (Ef. 6:15),
  7. Confiando siempre en Dios, que es el escudo para no creerle al diablo sus mentiras (Ef. 6:16),
  8. La promesa de nuestra salvación como un casco protector (Ef. 6:17),
  9. La Biblia siempre a la mano, en nuestra mente y nuestro corazón, que es La Espada del Espíritu de Dios para combatir al diablo (Ef. 6:17),
  10. Oración ferviente todo el tiempo, suplicando, no exigiendo; por los hermanos y los que hacen la obra de Dios (Ef. 6:18)
Si asistes a una iglesia, te consideras cristiano(a) y hasta tienes privilegios, sólo asegúrate desde lo más profundo de tu corazón haber nacido de nuevo. Si no estás seguro(a) de ello, estás en peligro de eterna condenación, y debes ser sincero(a) y honesto(a) contigo primeramente, y con Dios en tu confesión de fe.

Ora al Padre y pídele ayuda, entrégale tu vida a Jesucristo sinceramente si no los has hecho; despójate de todo privilegio y toda religiosidad con sinceridad y sencillez de corazón. Dios no desprecia al corazón contrito y humillado (Salmo 51:17).

Que Dios te bendiga!

http://stanleygomez.blogspot.com

La sobrenaturalidad de la Iglesia de Cristo.

domingo, 25 de septiembre de 2011

LA IGLESIA DE CRISTO TIENE INVESTIDURA DE PODER.

La Iglesia Del Señor como Cuerpo de Cristo, no es una organización humana inventada por hombres, sino UNA INSTITUCIÓN CREADA POR CRISTO MISMO, donde Él afirmó que ni las puertas del Hades prevalecerían contra ella; dando a entender que el infierno, es decir, el reino de las tinieblas gobernado por Satanás trataría de derribarla pero no podría.

La Iglesia de Cristo, es La Prometida Del Cordero; por tal razón, Dios la ha provisto de una investidura especial y sobrenatural, para protegerla contra todo ataque que venga del reino de maldad. (Ver Efesios 6:10-20)

Es un alto honor ser parte de Ella, pero también peligroso como Iglesia querer influenciar al mundo, o tratar de atraerlo por los medios que no sean los trazados por Cristo en La Sagrada Palabra, pudiendo así poner en riesgo su pureza y santidad.

La pureza de La Iglesia no se pierde por relacionarse con los pecadores, pues el Señor mismo dijo que es ahí donde nuestra luz debe brillar; pero sí debemos cuidar de no adoptar actitudes y costumbres que nos puedan hacer perder esa identidad.

Que El Señor les bendiga.

http://stanleygomez.blogspot.com

La unidad de La Iglesia.

sábado, 19 de marzo de 2011

Una de las mejores frases que he leído es esta:
"PASTOR, TODA NUESTRA IGLESIA ESTÁ EN ORACIÓN POR USTED"

Esto no sólo demuestra el cariño de un creyente hacia su pastor, o el afecto y cariño de un consiervo, o quizá un amigo; sino también, deja ver la unidad de La Iglesia como Cuerpo de Cristo; de la cual, cada creyente ha venido a ser partícipe en este gran proyecto de Dios como piedra viva; esto a pesar de nuestras flaquezas y debilidades, por nuestra humana naturaleza todavía permanente en nosotros.

Estos miembros, también sufren y se duelen cuando un hermano que está dolido, o pasando alguna dificultad. No haciendo leña del árbol caído, sino amando como amó Jesucristo. No reprochando los errores, pues Cristo jamás le reprochó a la mujer adúltera cuando iba a ser apedreada, excepto que no pecara más. Corrigiendo con amor y mansedumbre, no sea que también nosotros seamos tentados.

Todo verdadero hijo de Dios, ha aprendido primeramente a amar (1 Co 13); pues el amor es la esencia misma de Dios, del cual somos ahora linaje adquirido por la Sangre del Cordero (1 Pedro 2:9); y no sólo a amarnos entre hermanos, sino también, amar a todos nuestros semejantes (Marc 12:31) Por lo cual, sabiendo de antemano que cada uno podemos ser tentados, no somos implacables con los errores de los demás (Gál 6:1).

Los cristianos creemos en la Restauración de las personas; pues aún hay esperanza, aún para el más infeliz de los pecadores, no importa el color ni tamaño del pecado (Isaías 1:18)

Esto, a su vez, es contrario a los que como Sambalat (Neh 4), siempre presente hoy en día, se mofan y tratan de desanimar a los que trabajan por la causa de Dios. Lo que no saben, es que con sus burlas y sarcasmos atraen sobre si mismos cada vez más el juicio de Dios. El Señor tenga misericordia de los tales.

La mira del mundo está sobre los cristianos atentos para juzgarlos; pero los creyentes no debemos juzgar, pues nuestro líder nos enseñó en Mateo 6:37: No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.

El que tiene el Espíritu de Dios, comprenderá exactamente esta declaración de amor:

El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad.

Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las lenguas, y la ciencia acabará.
(1 Co 13:4-8)

Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.
En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros. Jesucristo.
(Juan 13:37-38)

Gocémonos en la verdad, y que Dios cumpla sus propósitos en todo. Pues mientras esté en su trono, nada escapará a su control.

Que Dios le bendiga.
http://stanleygomez.blogspot.com